No basta con ver abril en el calendario para anticipar lluvias mil, o divisar un círculo en el sol para saber si habrá lluvia o temblor. Existen métodos más precisos para prever los fenómenos climáticos y actuar oportunamente ante un eventual exceso de lluvia, sequía o una devastadora helada.
Justamente de eso tratan los Seminarios de Recomendaciones Técnicas organizados por la Comisión Regional de Emergencias Agrícolas y Gestión del Riesgo Agroclimático (CREA) Bio Bio, que en la jornada del 9 de noviembre congregó en el auditorio de INIA Quilamapu a asesores técnicos de INDAP y agricultores, resueltos a enfrentase al clima y evitar pérdidas de rendimiento en su fuente productiva. Lluvias más o lluvias menos, “el riesgo hay que internalizarlo como propio del agro”. Así lo enfatizó Cristián Jordán, Coordinador de la Unidad de Emergencias Agrícolas (EA) del Ministerio de Agricultura, un sistema que busca mitigar los efectos de los fenómenos climáticos, fortaleciendo las capacidades de los agricultores para enfrentarse al futuro. Por esto, sostuvo, “es fundamental aprovechar los tiempos buenos y poder atenuar los malos”, que expresados en cifras, son 9 los años de sequía hidrológica registrados en Chile entre 1970 y 2009.
El clima como insumo
Para la entrega de información precisa, a fines de 2009 se crea la web www.agroclima.cl, una iniciativa desarrollada por la Fundación de Desarrollo Frutícola, INIA y la Dirección Meteorológica de Chile.
El propósito de este portal es abrir una ventana de información técnica, donde se entregan modelos predictivos, alertas, pronósticos para todas las regiones del país, recopilada a través de Estaciones Meteorológicas Automáticas (EMAs), que suman más de 200 en distintos puntos estratégicos para el agro.
En INIA Quilamapu, el equipo de agro meteorología es coordinado por el Director Regional, Isaac Maldonado, quien intervino durante el seminario CREA para referirse a la importancia del manejo e interpretación de estos datos. “Las exigencias para el sector agrícola van aumentando y ya no basta con tener semillas y fertilizantes de última tecnología; el clima es también un insumo a incorporar en las decisiones productivas”, recalcó.
Efectivamente, los desafíos que hoy plantea el cambio climático, junto a fenómenos como la niña y el niño, deben ser objeto de análisis crítico para el agricultor. En este sentido, Isaac Maldonado, sugiere que la elección de uno u otro cultivo será la acertada, si el productor considera el clima de la zona y cuáles son las especies que mejor se adaptan a esa condición.
Vía: INIA.cl
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