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Ya sea de flor o fruto, una de las labores importantes en el manejo de huertos frutales es el raleo; para muchas especies es esta faena la responsable de la carga final de fruta y de la distribución de calibres que el huerto va a producir.

Debido a la gran cantidad de mano de obra que se utiliza, el raleo incrementa significativamente los costos de producción. La falta de disponibilidad de mano de obra y el corto tiempo en que esta operación debe realizarse, obliga a buscar alternativas para reemplazar el raleo manual.

Para los especialistas, las nuevas alternativas de raleadores químicos y mecánicos que existen en el mundo deben reevaluarse, enfatizando que ésta es la única forma de conocer su potencial en las actuales condiciones del mercado.

En este sentido, y según explicó el Ingeniero Agrónomo, Gamalier Lemus, de INIA Rayentué y director del Centro de Frutales de Carozo, en las últimas dos temporadas el mencionado centro frutícola ha estado evaluando el uso de bastones de raleo de flores. Un implemento diseñado para eliminar parte de las flores y botones florales, especialmente en ramillas, tanto para duraznero y nectarino, como también en algunas variedades de ciruelo japonés.

“Con el fin de conocer las características de esta herramienta, indicó el profesional, en la temporada 2010/2011 se probó el bastón de raleo (La Canne Vale) en plantas de seis años de edad del cultivar Dixon, ensayo en el que comparamos el uso de esta herramienta con el raleo manual tradicional.

Metodología

Según se explicó, la metodología usada contempló la selección de diez plantas, del cultivar Dixon, comparables en vigor. De ellas, cinco se sometieron, en septiembre, al raleo de alrededor del 50% de las flores, utilizando tanto el bastón de 80 cm y el de 1.20 cm. Junto con lo anterior, en el proceso de raleo de flores con el bastón se hizo una estimación del tiempo utilizado para esta labor en una hectárea, de modo de estimar la cantidad de implementos requeridos por un productor.

Las cinco planteas restantes se utilizaron como control. Al momento del raleo manual, convencional, en octubre, se contó el número de frutos por planta, en ambos tratamientos y se procedió a realizar el raleo manual para dejar alrededor de a 400 frutos por árbol. En precosecha, el 17 de enero, se evaluó la carga en términos de número de frutos por planta y se midió el calibre de los 30 frutos más grandes y de los 30 frutos más pequeños que tenía cada una de las plantas sometidas a este ensayo.

Resultados

Las evaluaciones realizadas del bastón de raleo en comparación con el raleo manual, temporada 2010/2011, arrojan como resultados que el uso del bastón, incrementaría tanto el calibre del fruto de 2 mm en promedio, y la producción en 3 toneladas por hectárea.

Estos datos, de una primera evaluación, indican que el uso del bastón resultaría beneficioso, toda vez que reduce los costos de producción –menos mano de obra utilizada- y mejora la calidad de la fruta, al aumentar el calibre. Ambos resultados redundan en una mayor rentabilidad para el productor.

Sin embargo, a juicio del Ing. Agrónomo, Gamalier Lemus, con el fin de tener un mejor control para la faena del raleo de frutales de carozo, estas evaluaciones deben repetirse en distintas temporadas y para distintos cultivares. “Las condiciones climáticas y diferentes manejos de huerto, indicó el especialista, pueden dar como resultado valores divergentes a los ya obtenidos”.

“Además, agregó, esta tecnología debe ponerse a punto en cuanto a la capacitación de los operarios y el tipo de implemento que es mejor para cada estructura de árbol. Pero, en resumen, se estima que esta herramienta puede resultar útil para lo frutales de carozo que se cultivan en nuestro país”, puntualizó Lemus.

Fuente: INIA

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