Un sabor inconfundible y una consistencia muy distinta a la que presenta el común de sus pares, son parte de las características de la primera cerveza artesanal de quínoa, innovador producto que comienza a posicionarse en el mercado nacional y que además ha recibido el reconocimiento de la crítica especializada.
La creación de este producto surge tras la labor investigativa realizada durante ocho meses por Ricardo Molina Acosta, quien trabaja desde el año 2008 con el objetivo de ofrecer a sus clientes un producto de excelente calidad y con un alto grado de diferenciación de otras cervezas artesanales.
Explica que con el apoyo de Corfo a través de su línea Capital Semilla, pudo crecer como empresa ya que les permitió en términos de inversión realizar una readecuación de infraestructura, instalar una cámara de frío y adquirir un filtro para la elaboración de cerveza.
A estas mejoras, agrega Molina, se incorporó también una estrategia de venta para llegar directamente a supermercados, bares, restaurantes y otros recintos de alta afluencia de público, buscando posicionar el producto en un mercado que experimenta tasas de crecimiento del orden del 22% anualmente.
El director regional de Corfo, Félix Ortiz, señaló que "esta exitosa experiencia refleja el apoyo que estamos entregando a los micro y pequeños empresarios desde Corfo a través de nuestro Capital Semilla, que se potenciará este año incentivando a que los emprendedores que tengan productos innovadores se acerquen a Corfo y postulen a recursos que les permitirán pasar desde la idea o prototipo a la venta real para que puedan crecer. Además esperamos que este instrumento sea aún más eficiente, a partir de las modificaciones incorporadas para mejorar y agilizar el cofinanciamiento a los emprendedores innovadores del país por un monto de hasta $40 millones", señaló.
Actualmente esta cervecería artesanal produce alrededor de seis mil litros mensuales y con una sostenida proyección de crecimiento, debido a la buena recepción del producto. Además de quitar la sed, la cerveza genera una sensación de saciedad al consumidor, originada del alto contenido proteico que tiene este cereal andino.
Tal ha sido el éxito de este producto que sus atributos han sido reconocidos por la Guía de la Cerveza de Chile que en sus ediciones 2010 y 2011 le otorgó una puntuación de 4,25 de un máximo de 5, que le da el estatus de "cerveza muy buena y destacada". En tanto, las variedades Cruzana Porte y Cruzana Red Ale obtuivieron 3,75 puntos.
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